Un golpe de música
Como un gran sueño, esos que tenés cada tanto cuando le ponés play a un disco, cerras los ojos y de repente sentís que estás en un recital donde la banda suena tan perfectamente bien que te das cuenta que no puede ser posible. Bueno, eso sintieron las siete mil personas que se acercaron al Luna Park a ver a Incubus en vivo, pero con la diferencia de que esta vez era real.
Porque desde que los platillos de Pasillas empezaron a sonar en Circles y Mike Einziger hizo su característico riff todo sonó a la perfección, exactamente igual que en Morning View, como si fueran una maquinita...un reloj suizo, pero con la potencia y presencia de una banda en vivo.
Comentarios